El Carignan se luce en Bélgica y conquista nuevos paladares
Reconocido por ser un consumidor de vinos Premium, Bélgica fue el destino del Carignan que celebró actividades con el fin de dar a conocer su historia de larga trayectoria en Chile, además de su componente social para conquistar a los consumidores belgas.
El lunes 7 de septiembre, se realizó una cena con bloggers influyentes de vino y gastronomía de ese país, los que tuvieron la oportunidad de probar once marcas distintas de este vino y maridarlas con unas de las comidas belgas típicas como las “meatballs” del conocido restaurant “Balls & Glory”, que consiste en bolas de carne rellenas con diferentes ingredientes. En la ocasión el presidente de VIGNO mostró la versatilidad de este vino que en Chile tiene una historia de más de 70 años.
Asimismo, al día siguiente en el mismo restaurante en Bruselas, se realizó un Master Class y una degustación especializada para importadores, distribuidores, tiendas especializadas y prensa, quienes cataron las distintas marcas de VIGNO.
“Estamos muy expectante de los resultados que podamos tener. Esto nos permite poder presentar a VIGNO en Bélgica y contar la historia de este vino en Chile. Además, como asociación queremos tener más presencia en los mercados mundiales y Europa es uno de los lugares para posicionarnos, junto con Brasil”, señaló el presidente de VIGNO, Andrés Sánchez.
“Bélgica es un mercado muy importante para los vinos chilenos, dónde ocupan el primer lugar entre los países del nuevo mundo, lo que lo hace muy atractivo para el Carignan. Asimismo, el mercado belga siempre está abierto a descubrir nuevas propuestas, por eso creemos que se abre una gran oportunidad para VIGNO en Bélgica”, destacó Susana Veliz, Representante Comercial de ProChile en Bélgica.
Un Vino con historia
El Carignan es un vino distinto. Este se da sólo en el Secano del Maule, lugar seco, pero perfecto para estas parras que hoy tienen 30 años y más. Utilizado en un principio para darle color y volumen a los vinos de Uva País, el Carignan recién tuvo su reconocimiento hace solo unos años atrás en que los productores de esta zona del Maule comenzaron a producirlo.
Luego vino la creación de VIGNO (Vignadores del Carignan) y la búsqueda de ser reconocidos a través de una Denominación de Origen para este vino que cada día conquista más paladares en Chile y el mundo.
Para ser un Vignador del Carignan y estar en VIGNO, la uva debe ser carignan y venir del secano maulino; las parras deben tener mínimo 30 años y no haber sido irrigadas. Las parras tienen que ser en formación de cabeza (pequeños arbolitos) y el vino debe ser mínimo 55% carignan y el restante de otras cepas con una guarda mínima de 2 años antes de salir al mercado.
VIGNO nace en 2010 en la zona del Maule con el fin de rescatar una cultura y territorio donde el cultivo de la vid se remonta a la llegada de los españoles hace más de 400 años y convertir al Carignan en vinos de carácter local con clase mundial.
Comunicaciones Direcon-ProChile