Exhibir las características geográficas, climáticas y humanas que hacen de Chile un país con condiciones incomparables para la producción de alimentos de calidad y atributos apreciados en el mundo entero, fue el principal objetivo de un almuerzo realizado este viernes por ProChile en la ciudad de Chicago.

Ante un grupo de importadores y prensa especializada en el rubro de alimentos y bebidas, el representante comercial de ProChile, Rodolfo Montecinos, presentó la campaña internacional “Foods from Chile, source of life”, recalcando que nuestro país “es un proveedor confiable de productos seguros y sanos que cumplen con altos estándares requeridos por los más exigentes compradores”.

Siguiendo esa línea, Montecinos aseguró que “los alimentos de Chile ocupan posiciones protagónicas en los mercados internacionales, ya que el país tiene una inusual variedad climática, donde destaca el clima mediterráneo que beneficia la obtención de materia prima óptima, la producción escalonada y en contra estación del Hemisferio Norte”.

Al almuerzo realizado en el restaurante “Gibson’s Bar and Steakhouse” de Chicago asistieron, entre otros, Blanca Berthier, directora de Chicagoland Chamber of Commerce; Jaime Di Paulo, de Little Village Chamber of Commerce; Omar Duque, de Illinois Hispanic Chamber of Commerce; Heather Weinthaler, propietaria de la importadora de vinos y licores “Hacienda”; y los periodistas Alex Rodriguez y André Sulluchuco, editor de The Chicago Tribune y representante de las revistas Carne Tec y Plate, respectivamente.

Ante la audiencia, el representante comercial de ProChile en Chicago recordó que en 2015 Estados Unidos fue el principal mercado para nuestras exportaciones no cobre, con envíos que bordearon los US$ 6.285 millones. “La mayor parte correspondió a productos del sector de alimentos y bebidas, entre los que destacan el salmón, los orgánicos, el aceite de oliva y cítricos frescos, para los cuales Estados Unidos es su mercado más importante”, comentó.

A través de actividades como ésta, ProChile busca incrementar la presencia de los alimentos del país en una ciudad que es actualmente la tercera más grande de Estados Unidos, después de Nueva York y Los Ángeles; donde existen 22 restaurantes con estrellas Michelin y una población reconocida por su alto nivel cultural y diversidad económica.